Poder-personalEl poder sobre tu vida lo tienes tú y solamente tú. Por este motivo es importante que te pares un momento a observar y darte cuenta de las partes de tu poder personal que has ido dando a otras personas a lo largo de tu vida. Al observarlas podrás ir recuperando aquellas dosis de poder que en este momento no se encuentran dentro de ti. Para ello, es necesario que te des cuenta de los “beneficios secundarios” que obtienes cuando le das el poder de tu vida, de tus emociones, de tus pensamientos y de tus acciones a otras personas.

Es probable que en muchas ocasiones, pienses que estarás bien cuando “el otro” haga esto o aquello, cuando te enseñe algo, cuando te quiera…, y, por eso, puedes pasar mucho tiempo enfocándote en los demás: en lo que hacen, dicen, piensan o sienten. Esto jamás te dará la felicidad ya que cada persona vive la vida desde su visión subjetiva y, por ello, lo que para uno puede ser adecuado, para otro no lo es. Recuerda siempre que: “Los demás jamás harán las cosas como tu quieres ya que cada uno vive desde su propio punto de vista”.

Si sientes que tienes puesta tu atención en los demás, es importante que comiences a redirigir toda esa atención y energía que pones hacia afuera y la lleves hacia adentro, haciéndote cargo de tus pensamientos, emociones y acciones, para que, de esta manera, puedas recuperar tu poder personal y dejar de dárselo a otras personas o a las circunstancias.

Quiero recordarte que absolutamente todo lo que necesitas para ser feliz está dentro de ti y que lo mejor que puedes hacer en tu vida es ser coherente contigo mismo. Si como consecuencia de ello, también eres coherente con los demás ¡será genial!

Aquí te dejo un pequeño vídeo para que puedas reflexionar sobre el tema, y si te apetece compartir tus reflexiones ¡Será genial!.